En un lugar de La Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme…

El 16 de enero de 1605 veía la luz una de las mejores obras de la literatura universal y, sin duda, la novela cumbre española por antonomasia: El ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha, con una Segunda parte del ingenioso caballero don Quijote de La Mancha publicada diez años después.

La obra, considerada la primera novela moderna, es una parodia que trata de desmitificar los libros de caballería a la vez que critica la sociedad de la España que al autor le tocó vivir.

Este fue Miguel de Cervantes Saavedra (29 de septiembre de 1547-22 de abril de 1616), novelista, poeta, dramaturgo y soldado madrileño, cuya obra le convertiría en la máxima figura de la literatura española. Sin embargo, Cervantes tuvo una vida cuanto menos complicada –con cautiverios y periodos en la cárcel incluidos-, siendo en el final de su vida y gracias al Quijote cuando recibió cierta fama y reconocimiento aunque sin venir acompañado de una economía solvente.

En cualquier caso, la Historia le ha sabido recompensar, convirtiendo al Quijote en la obra más leída después de la Biblia.

En el Fondo Bibliográfico y Documental Manuel Campos disponemos de algunas ediciones de la obra magna, entre las que queremos destacar una versión infantil en la que se nos presenta la historia del Quijote en una colección de cuatro tomos adaptada a la niñez y acompañada de ilustraciones:

Cervantes Saavedra, M. de, (1950). El ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha. Adaptación y biografía de Sebastián Juan Arbó. Ilustraciones de Iñigo, Barcelona, España: Archivo de Arte, S.L.

 La colección.

Tomo I, pág. 14.